Los victimarios principales son la Policía y la Guardia Civil –con 42 y 41 casos–, participando juntos en un caso más. La Ertzaintza computa en tres casos. Los grupos incontrolados o parapoliciales como el Batallón Vasco Español, los GAL o la Organización Armada por la liberación nacional contra el Marxismo y el Separatismo (OAMAS) también aparecen identificados en un total de seis casos.